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Mercedes Margalot (ARG), Ali Lee (CAN) y Max Caldas (ARG)

Fuera de la cancha, pero aún en el juego

15 de abril de 2019

Fuera de la cancha, pero aún en el juego

La transición del deporte a otra carrera es un tema difícil para los atletas. Después de todo, si ha sido un atleta de élite hasta los veinte o treinta y pocos años, ese fue su único objetivo durante más de la mitad de su vida, ciertamente toda su vida adulta.

Y los atletas son notoriamente decididos. Tienen que serlo. En el ambiente competitivo del deporte de élite, no hay espacio para tomarse un respiro o tener un descanso en la carrera.

Entonces, ¿cómo los atletas encuentran, entran y hacen también una segunda carrera exitosa? Para la mayoría de nosotros, tener éxito en la esfera del mundo laboral es lo suficientemente difícil, pero ¿ser exitoso dos veces? Esa una gran labor.

Hablamos con tres ex jugadores de sus respectivos equipos nacionales de hockey, todos los cuales han disfrutado de carreras exitosas dentro del mundo del hockey, pero retirados de la acción en el campo de juego.


Mercedes
Margalot (Argentina)

Mercedes Margalot es una cara conocida para las legiones de simpatizantes de Las Leonas. Es una leyenda del hockey que compitió en tres Juegos Olímpicos, dos Copas Mundiales, cuatro Trofeos de Campeones y tres Juegos Panamericanos. Entre las medallas se encuentra la de plata olímpica (Sydney 2000), el bronce olímpico (Atenas 2004, Beijing 2008), la medalla de oro en la Copa del Mundo (Perth 2002) y la medalla de bronce en la Copa del Mundo (Madrid 2006). Ella tiene dos medallas de oro del Trofeo de Campeones (2001 y 2008), más una de plata y una de bronce de las ediciones intermedias. ¡Margalot fue parte de un equipo que se mantuvo invicto en los Juegos Panamericanos!

Ahora, Margalot sigue siendo la cara del hockey, pero desde un punto de vista como presentadora. Trabaja como periodista deportiva, especializada en hockey, para ESPN Sport Center, una posición que alcanzó luego de obtener una valiosa experiencia en la radio.

"Después de muchos años de ser deportista, hice contactos dentro del periodismo deportivo", explica. “Entonces, después de los Juegos Olímpicos de Beijing, me puse en contacto con ellos y comencé a trabajar en la radio. Después de unos años me lancé a la televisión como presentadora".

Antes de convertirse en una atleta de élite, Margalot tenía la ambición de ser periodista, pero lo dejo de lado cuando comenzó a florecer su carrera en el hockey. Era una ambición que se enterró cuando la alentaron a seguir los pasos de su madre estudiando para ser dentista.

Mientras perseguía una carrera en el equipo nacional de hockey, Margalot también pasó sus exámenes de odontología y, de hecho, comenzó a hacer prácticas como dentista. Sin embargo, pronto se dio cuenta de que tratar los problemas dentales de las personas no era para ella.

La arena deportiva era el dominio natural de Margalot y ella ha aprovechado al máximo su conocimiento deportivo, que es muy transferible de un deporte a otro, y los contactos que todavía tiene dentro del hockey.

"Todo lo que experimenté durante tantos años de jugar al hockey ha contribuido a mi conocimiento del deporte", dice ella. "Tengo autoridad y autenticidad cuando trabajo como periodista gracias a mi propia experiencia del deporte de élite".


Ali Lee
(Canadá)

Otra jugadora que ha usado todos sus contactos y conocimientos deportivos para forjar una carrera es Ali Lee de Canadá.

"Mi rol actual es como Oficial de Comunicaciones para el centro “Vikes” de Atletismo y Recreación de la Universidad de Victoria en British Columbia, Canadá", dice la ex defensora de su equipo nacional.

“Estoy a cargo de muchas de las comunicaciones internas y externas del departamento, desde nuestros recursos digitales (sitio web, redes sociales y marketing digital) hasta la voz y el tono en cualquier discurso, presentación o campaña. También gestiono la cobertura deportiva de la universidad desde la página web, hasta estadísticas en vivo, resúmenes posteriores al juego, fotografía y relaciones con los medios. Es un gran portfolio, pero sobre todo me siento como si estuviera en medio de todos nuestros eventos ".

Es un rol que implica largas horas, pero, dice Lee: "De vez en cuando recibo un correo electrónico de agradecimiento o una llamada telefónica de un atleta o padre que me dice que la historia que escribí capturó el momento de manera brillante. O la transmisión por Internet que logré le permitió a la abuela del otro lado del país verlos y verlos ganar. Esos son los momentos que más me importan ".

Lee dio el paso de jugador a comunicador a través de una licenciatura en bioquímica. Ella dice que su viraje de la ciencia a las comunicaciones sucedió durante su carrera en el equipo nacional mientras ganaba nuevas experiencias.

“En ese momento, no había una presencia fuerte en el sitio web que presentara a los atletas del equipo nacional. Cuando estaba de gira o en competencias, utilicé nuestros videos de los partidos e hice videos destacados en iMovie y entrevisté a mis compañeros de equipo después de los partidos para armar videos con resúmenes del partido para YouTube. "Los enviaría de vuelta a casa para que mi familia, que nunca pudo verme competir en un partido que no era en mi ciudad natal, pudiera sentirse parte de la experiencia".

El interés de Lee en una carrera en comunicaciones probablemente se consolidó durante el período previo a los Juegos de la Commonwealth de 2010.

“Antes de los Juegos de la Commonwealth, tuvimos que hacer un gran esfuerzo para recaudar fondos, así que, con la ayuda de uno de los padres de mis compañeros de equipo, creamos un sitio web para comenzar a hacer campaña sobre nuestro equipo. Lo actualicé a lo largo del torneo y todo el proceso me enseñó muchas habilidades, desde la fotografía hasta la edición de videos, la actualización del sitio web y las redes sociales.”

Cuando se retiró del equipo nacional, Lee era la persona perfecta para una posición multimedia en el departamento de atletismo de la universidad a la que había asistido. Pronto, su arduo trabajo la llevó a una posición como líder de comunicaciones en el departamento de atletismo.

Las propias experiencias de Lee como jugadora han impulsado la manera en que opera: "Me gusta escribir no solo sobre las personas que marcan goles o porteros que hacen buenas atajadas. Hablo de esa recuperación en el medio de la cancha, que cambia el impulso o un pase que condujo unos movimientos más tarde, a un gol. Mi apreciación por cada momento y cada persona involucrada en llevar a un equipo o atleta al éxito siempre está en primer plano en mi mente ".

Cada día es una experiencia y un aprendizaje. “Como atleta, pude conocer a todos los medios locales en mi ciudad natal y ahora trabajo con ellos regularmente para cubrir a los atletas en mi universidad. Esa relación también me abrió las puertas para que aprendiera, incluso para obtener consejos de algunos de los mejores periodistas deportivos de la ciudad, experiencia en conferencias de prensa e incluso pude escribir noticias para un “teleprompter” y visitar el estudio cuando la emisora leyó mi guion en CTV en Vancouver ".

Lee dice que no tenía planes de terminar en comunicaciones. De hecho, se ríe: "Creo que me eligió un poco ya que los medios sociales y digitales evolucionaron justo en el momento en que ingresé al mundo del trabajo".


Max Caldas
(Argentina)

La carrera de entrenador siempre estuvo como una posibilidad para Max Caldas, aunque nadie hubiera previsto el éxito que tendría el jugador del equipo nacional masculino de Argentina.

Oro olímpico y oro en la copa del mundo con el equipo femenino Holandés en 2012 y 2014 respectivamente, y dos medallas de oro en el Campeonato EuroHockey y una de plata en la Copa del Mundo Odisha de 2018 con el equipo masculino holandés son un buen rendimiento en un mandato de nueve años con el KNHB (el organismo que gobierna el hockey holandés).

Caldas también ha sido elegido como el Entrenador del Año de la FIH dos veces, en 2014 y 2017. Compartió este último honor con el entrenador de Bélgica, Shane McLeod.

"Siempre me ha gustado ser entrenador, desde que era chico", dice Caldas. "Era un medio para obtener dinero fácil cuando era joven y significaba que no tenía que pedirle dinero a mis padres. “

"Pero también crecí jugando al hockey en el Club Ciudad de Buenos Aires, donde era un comportamiento normal ayudar en tu club no solo como jugador, sino también como entrenador.”

Para Caldas, eso significaba entrenar a jugadores más jóvenes cuando él solo tenía 17 años. Solía trabajar junto con los miembros del primer equipo o el equipo nacional argentino para armar entrenamientos en el club.

La temprana experiencia como entrenador desde tan joven sembro las semillas para su carrera como entrenador, tanto que cuando estaba llegando al final de sus días como jugador, Caldas ya estaba viendo el juego "como un entrenador, en lugar de como un jugador".

Desde que se retiró como jugador, Caldas ha sido entrenador en todos los niveles posibles, desde equipos juveniles, equipos de clubes y equipos representativos hasta equipos nacionales. Ha visto muchos cambios en ese tiempo.

“Ha habido grandes avances hacia un enfoque más inclusivo. "Esto se aplica a la relación que el cuerpo técnico tiene con los jugadores y la forma en que los jugadores más grandes reciben y guían a los jugadores más jóvenes"

Sin embargo, Caldas expresa cautela ante las exigencias del jugador internacional moderno. Él dice que los jugadores deben buscar un equilibrio en sus vidas y encontrar tiempo entre entrenar y jugar, para amigos, familiares y construir una carrera para cuando el hockey se termine.

Cuando se trata de por qué disfruta tanto de ser entrenador, Caldas muestra mucho entusiasmo: "Presenta la oportunidad de trabajar con la persona detrás del atleta, la oportunidad de crecer junto con sus jugadores y cuerpo técnico, la oportunidad de reinventarme a medida que avanzamos, aprendiendo algo todos los días.

“Ciertamente no se trata simplemente de ganar contra perder. Ese no es nuestro rol. Eso es sólo una pequeña parte de ello. A veces puede consumirte y tomar temporalmente el control de tu trayecto, pero nunca debería.

"Para mí, si hay una desventaja en este trabajo, es decepcionar a los jugadores. No eligiéndolos, por ejemplo. O no siempre ser quien realmente eres. A veces tenes que ponerte en un personaje, pero a mí me gusta presentar el verdadero yo a todos, en todo momento ".

Mientras era jugador, Caldas ya estaba pensando como un entrenador. Ahora, en un rol de entrenador, aún conserva la capacidad de pensar como un jugador. Sin embargo, no es algo con lo que se sienta cómodo. "Como ex jugador, a veces podés ponerte en el lugar de los jugadores, después de haber pasado por algo similar. Pero creo que deberías pensar como entrenador cuando eres entrenador. El jugador dentro tuyo tiene que dar un paso al costado ".

Caldas se ríe al recordar sus primeras percepciones de lo que significaba ser el primer entrenador de un equipo: "Pensé que era fácil. Siempre tuve esta idea en mente que los entrenadores la tenían fácil. Los jugadores corren y trabajan duro y los entrenadores simplemente ven el video ".

Esa ilusión temprana se desvaneció cuando Caldas fue a su primer torneo como entrenador asistente del equipo masculino de Holanda Sub-21 en 2001. "Regresé y estuve enfermo por una semana, estaba agotado.”

“Es una forma diferente de agotar tu energía. Cómo encontrar tiempo para vos todos los días; Cómo podes evolucionar, no solo para vos sino también para tus jugadores. "Debes tomar una línea finamente equilibrada entre ayudar y apoyar a cada jugador, pero también saber cuándo empujarlos, guiarlos hacia adelante".

"Y", agrega con sorprendente humildad y honestidad, "Tenes que tener la capacidad de ser de mente abierta. No solo creer en una cosa, no pensar "esta es la única manera", sino conservar la capacidad de adquirir nuevos conocimientos, explorar nuevas formas y aprender de todo y de todos. Trabajo en mi desarrollo como entrenador todos los días. Nunca he sentido que ya llegué a ese lugar, o que soy bueno en eso ".

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