Durante años no tuvieron una cancha de césped sintético, pero lo lograron igual. El sábado 14 de septiembre terminó el Challenge de caballeros que daba una sola plaza a la gran preciada Copa Panamericana que se jugará en julio de 2025 en Montevideo –que a su vez da un lugar para el Mundial 2026-. Trinidad y Tobago, que no pudo entrenarse durante mucho tiempo en las mejores condiciones, finalmente llegó al objetivo del primer puesto. Dio el en el blanco. Y es que soñar, soñar no cuesta nada. En realidad sí: esfuerzo.
La final no dejó lugar para las dudas. La victoria del país del Caribe fue 6 a 0 ante Perú. Los trinitenses se colgaron la medalla más brillante y consiguieron así el boleto querido por todos: la clasificación al torneo continental para jugar con los mejores de América.
Su capitán, Jordan Vieira, de los más experimentados del plantel con 28 años y diez campeonatos oficiales en su haber, dijo estar orgulloso por lo logrado, pero además explicó cuál fue el camino hasta acá y cuáles son las metas para Montevideo 2025: “En Uruguay no sólo queremos sumar números, sino competir contra los equipos más grandes. Hemos estado sin césped artificial durante los últimos ocho años y, recientemente, finalmente lo hemos reinstalado, lo que es un gran impulso para nosotros. Hay muchas caras nuevas y muchachos más jóvenes en el equipo ahora y debemos asegurarnos de ir mejorando y aprovechar el impulso de este torneo si queremos tener éxito en la Copa Panamericana”, concluyó.
Seguir creciendo para Trinidad y Tobago es parte de su esencia, superar obstáculos y hacerlo siempre con una sonrisa también. Próximo paso: escalar por encima del 7° puesto obtenido en 2022 en Santiago de Chile.
Cada equipo tiene sus proyectos adaptados a su realidad. Perú quedó en el segundo lugar y para Fernando López, referente en la cancha del plantel, ese resultado “fue afianzar los avances de los últimos años”. Y agregó: “Desde este año inicia un nuevo ciclo con miras a los Panamericanos 2027. Apuntamos a consolidarnos para poder subir de posición. Se vienen tres años de mucha preparación para esos Juegos. En dicho proceso los Juegos Odesur del 2026 también son un hito clave en el que deberíamos de poder entrar a pelear el tercer puesto. Para esto es clave seguir contando con el apoyo necesario”, dijo el capitán peruano.
Para Paraguay, cumplir con lo pactado era subirse al podio, y así fue. Superaron a Guatemala por 2 a 1 y se llevaron a casa la presea de bronce. Alexís Pereyra, portador de la cinta, explicó cómo siguen la agenda en esta actividad: “El objetivo principal a medio y largo plazo sería el Panamericano Junior Asunción 2025. Allí también esperamos llegar a podio. Además queremos seguir fomentando el desarrollo de este hermoso deporte en nuestra nación”. De a poco, van avanzando y subiendo peldaños con cada competencia.
La realidad de Guatemala (4°) es distinta. El líder Juan Carlos Villatoro habló sobre lo que busca su Selección: “Participar en torneos internacionales es crucial porque brinda una plataforma para mostrar el potencial deportivo del país. Aunque a menudo los países centroamericanos enfrentan desafíos debido a la falta de recursos y apoyo, estos torneos permiten demostrar que, a pesar de ser países en desarrollo, tenemos una gran capacidad para competir a nivel internacional”, explicó el jugador que llegó a los 28 caps con la camiseta guatemalteca.
Cada país se ajusta a lo que vive, sin embargo todos se permiten seguir soñando a pesar de las dificultades. Como lo hizo Trinidad y Tobago que finalmente lo logró y obtuvo su oro. Pronto será el turno de las mujeres: el 21 de septiembre comenzará la aventura con Brasil, Guyana, Paraguay, México y Bermuda. También habrá sólo un pasaje para la Copa Panamericana.