Aunque hayas logrado medallas Olímpicas, títulos en el Champions Trophy y gran éxito global en tu deporte, aún recuerdas donde comenzó todo. Por lo menos es lo que creen los tres jugadores súper estrellas de hockey que hablaron de sus recuerdos en los Campeonatos Panamericanos Junior.
Lucas Vila solo tenía 19 años cuando jugó para Argentina en el Campeonato Panamericano Junior de Hockey en 2005, sus nervios se aplacaron en el partido inaugural donde los argentinos se impusieron 17- 1 sobre Jamaica y Lucas escribió dos veces su nombre en la lista de goleadores.
Hablando de ese torneo, Lucas dice: “Me sentía verdaderamente excitado y ansioso en ese momento. Porque para nuestro grupo este era nuestro primer gran torneo y obtener la clasificación para la Copa del Mundo Junior era un paso muy importante.
“Jugamos realmente bien durante la primera fase” agrega- efectivamente Argentina marcó 46 goles y solamente fueron cuatro los que lograron convertirle a Argentina, en la primera ronda. La presión sobre el equipo fue en aumento en la semifinal y en la final, pero vencieron a México y Chile respectivamente y continuaron manteniendo a Argentina dentro de la competencia en un 100%.
¿Cuáles fueron los momentos especiales durante el torneo? Quizás sorpresivamente no fueron los triunfos o levantar la copa lo que Lucas recuerda tan bien. Fue más lo poco convencional del evento. “Hmmm, tuvimos algunos momentos especiales porque el torneo se realizó en Cuba. Y hubo algunas situaciones “no tradicionales”. Por ejemplo, entrenábamos en un gimnasio al aire libre vecino a la cancha de hockey, sin techo, con piso de tierra y algunas pesas viejas. Eso lo hizo diferente y muy especial.”
Para Lucas, ese gimnasio polvoriento fue la cuna de una carrera brillante. “Es donde todo comienza... es el momento perfecto para disfrutar el juego, quizás con menos responsabilidad de la que tendrás que afrontar más adelante, con más libertad para jugar. También es la primera oportunidad que tienes para compararte con jugadores de otros países. Y fuera de la cancha, cuando termina el partido hay todavía más diversión, porque todos los jugadores tienen una edad similar y todo es nuevo.”
El hockey es parte de la vida cotidiana de Vila, sus hermanos mayores Matías y Rodrigo jugaron para Argentina y fueron modelos obvios para su joven hermano. Lucas también nombra a la súper estrella holandesa Teun de Nooijer y el australiano Jamie Dwyer como dos de los jugadores que le gustaban.
Para el actual equipo de jóvenes jugadores argentinos, que se está preparando para su primera entrada real a la escena internacional, Lucas tiene este consejo: “¡Tomen cada partido seriamente, lo jugarán solamente una vez en la vida! Como dije antes, esto es donde todo empieza, así que asegúrense hacerlo correctamente. ¡Sobre todo, diviértanse y disfruten! Fuera de la cancha, encuentren tiempo para relajarse y hacer amigos, pero sean cuidadosos y distingan cuando es el momento para relajarse y cuando es el que deben estar más concentrados.”
Darren Cowie es un héroe nacional en Trinidad & Tobago. Es el capitán del equipo nacional y entrenador del equipo de Trinidad & Tobago que estará disputando el título en Toronto en mayo, Cowie es una de las luces que guían el desarrollo del desarrollo del hockey en la isla.
Como Lucas Vila, Darren jugó en el Campeonato Panamericano Junior en 2005 y era el capitán del equipo. Darren dice: “Hubo sentimientos mezclados respecto de esta competencia ya que debió jugarse en 2004. Siendo una pequeña nación de hockey perdimos muchos jugadores debido a la edad, que podrían haber llevado la experiencia del equipo mayor al grupo. Fuera de esto, la vivencia fue maravillosa y me dio una muy necesaria visión de lo que es el costado internacional del deporte.”
Durante el torneo, Darren tuvo algunos momentos destacados que aún revive 11 años después. “Anotar frente a México para empatar el marcador todavía está grabado en mi mente. Yo paraba los corners, y en este en particular, el servicio fue malo y vino a mi derecha. Lo que fue peor es que cuando pegué a la portería “mordí” la pelota. Afortunadamente tomó al portero y al jugador en el poste con la guardia baja y la pelota eventualmente cruzó la línea. Desafortunadamente ese gol no fue suficiente y México se llevó el partido por 4-3.”
Darren recuerda un alto nivel de amistad en la competencia entre los jugadores del equipo. En particular, recuerda a Kiel Murray y Wayne Legerton – ambos pasaron a jugar para el equipo nacional mayor – tratando de lograr el título de máximo goleador. “Ambos eran mortales en los corners,” dice. “Kiel con la pegada, Wayne con el drag-flick. Wayne finalmente se impuso a Kiel ocupando el quinto lugar en la tabla de goleadores mientras que Kiel ocupó el noveno. Pedro Ibarra de Argentina fue el máximo goleador, mientras que Pat Harris (USA) marcó un buen número de goles para Estados Unidos.”
Como todo jugador joven, relativamente nuevo en la escena internacional, Darren y sus pares inevitablemente experimentaron momentos de duda y falta de confianza. Dice que su remedio para los momentos en que las cosas no salían tan bien era trabajar más duro. “De tanto en tanto surgían los sentimientos negativos que se reflejarían en un mal pase de la pelota. Algo que siempre ayudaba era pensar que había una sola cosa que no podía fallar: trabajar duro. En consecuencia, por cada toque malo con la pelota trabajaba dos veces más duro para recuperar la posesión y en el próximo entrenamiento, trabajaba duro el primer toque.”
Un tema común entre los muchos jugadores que representan a sus países en los Campeonatos Panamericanos Junior es el gran apoyo que reciben de sus padres y familia. Para Darren esto fue importante, particularmente porque pasó gran parte de su adolescencia tratando de decidir por el hockey el básquet y el futbol. Afortunadamente para el hockey de Trinidad & Tobago, sus padres estaban muy involucrados en el hockey y guiaron a su hijo en esa dirección. Su altura – 5’6” / 165cm – también fue un factor determinante, dice Darren, explicando como el hockey le ganó al básquet eventualmente.
Fuera de la familia, un hombre fue consistentemente una figura influyente; Kwandwane Browne, la leyenda del hockey. Darren dice de Browne, el jugador con más partidos internacionales de Trinidad & Tobago y ahora entrenador nacional: “Fue un mentor, y todavía lo es, especialmente mientras sigo sus pasos, incrementando mi rol como entrenador. Pero su atención a los detalles cuando juega está fuera de toda comparación”
Trinidad & Tobago terminó octavo en 2005, perdiendo frente a Barbados en el partido por el 7mo y 8vo lugar. Para Darren este fue el comienzo de una larga carrera internacional y el momento que más se involucró en el hockey. Pero para él, el mejor momento de su carrera fue en la Copa Panamericana de 2013, donde Trinidad & Tobago ganó el bronce. “Quizás no suene como algo tan grande,” dice. “pero fue la primera vez desde 1967 que un equipo mayor de hockey de Trinidad & Tobago ganó una medalla Panamericana. Fue aún más especial cuando Kwan y el entrenador Glenn 'Fido' Francis, me confiaron la capitanía.”
La carrera de hockey de Carla Rebecchi estuvo llena de momentos de oro. Entre los muchos trofeos, la capitana de Las Leonas tiene cinco medallas de oro de Champions Trophy, una Copa del Mundo de oro y una medalla Olímpica de plata y una de bronce. De la misma forma que Lucas y Darren, Carla se graduó en el Campeonato Panamericano Junior de 2005, torneo que Argentina ganó tras vencer a EEUU en la final.
Carla anotó su primer gol frente a Chile, pero a pesar que Argentina sumó la increíble cantidad de 53 goles en cinco partidos, y ninguno en contra, la delantera no pudo volver a anotar hasta la final, que Argentina ganó 3-1 frente a EEUU. Para Carla, sin embargo, el torneo fue justo lo que necesitaba para desarrollar confianza y cementar su lugar en el equipo mayor.
“Jugué solo un Campeonato Panamericano Junior en Puerto Rico. Ya estaba jugando para el equipo mayor, por lo que había muchas expectativas sobre mí. Estaba realmente excitada antes del primer partido. Fue un gran torneo para mí, me entrené para estar allí desde los 17 años– aunque el torneo llegó cuando ya tenía 20.
“Pasamos un gran momento, todo era nuevo para nosotras, fue magnífico viajar y conocer otro país y conocer gente de otros países. Creo que el consejo que les daría a los jóvenes jugadores hoy seria: Que disfruten del grupo junior, es grandioso pero pasa realmente rápido. Deben usar los campeonatos junior para ganar confianza y deben estar abiertos a aprender todo lo que puedan.”
